Si estas realizando una dieta o estás pensando realizar una, te preguntarás si puedes consumir pan, más aun cuando estamos acostumbrados a verlo en la mesa familiar. También es cierto que es una importante fuente de hidratos de carbono.
Estos hidratos de carbono o carbohidratos son muy importantes para el correcto funcionamiento del cuerpo, ya que son los nutrientes encargados de transformarse en energía para que el cuerpo funcione correctamente. Los carbohidratos se dividen en complejos y simples, dependiendo de la estructura química del alimento y de la velocidad en que el organismo lo digiere.
Cuando hablamos de carbohidratos simples nos referimos a los que tienen uno o dos azúcares, por ejemplo, los que encontramos en la lactosa, frutas, galactosa, algunas verduras o cerveza.
Los carbohidratos de tipo complejo tienen tres o más azúcares, son los que se conocen como alimentos ricos en almidón. Entre ellos encontramos al pan, además de algunas legumbres y verduras ricas en almidón. Lo más sano sería obtener estos carbohidratos de la manera más natural posible, tratando de ingerir frutas o cereales integrales, lo que no quiere decir que elimines totalmente el pan de tu vida.
Estudios que se realizaron recientemente concluyeron que quienes llevaban a cabo dietas bajas en calorías en las cuales comieron pan de trigo integral obtuvieron más éxito que los que solo comieron granos refinados como el arroz blanco.
Lo que si es aconsejable que hagas es reducir las porciones diarias de pan al mínimo, incorporando alimentos ricos en fibras y granos enteros, como guisantes, frijoles, arvejas o lentejas.