Si el principal problema que padeces es poseer una piel sensible o delicada, debes esforzarte siempre por mantenerla fresca, humectada y suave con una rutina sencilla de belleza diaria.
Las pieles delicadas, suelen resecarse, presentar ronchas o manchas en el transcurso del día, incluso experimentar irritación. Todo esto se debe a cambios en el clima, la temperatura, efectos de las comidas, el sol, la humedad, el calor, e incluso alguna reacción generada por el uso de cremas, perfumes y otros productos que puedan contener distintos alérgenos.
Las pieles delicadas, ¿qué son y cómo cuidarlas?
Las pieles delicadas se caracterizan primordialmente por reaccionar de forma fácil a estímulos, reaccionando como se planteó en líneas anteriores al contacto con diversos agentes externos.
Esta clase de pieles, generan una producción significativamente elevada de radicales libres, con los cual el proceso de envejecimiento de la piel, se vuelve mucho más acelerado, generando que la piel se presente con una edad diferente a tu edad en años.
Añadido a lo anterior, se hace preciso conocer que las pieles delicadas presentan una alteración de la capa superficial de la piel o barrera de la epidermis, causando principalmente la experimentación de una piel deshidratada.
Las pieles delicadas, deben contar con una rutina sana y saludable, muy delicada y que le brinde, además, el cuidado propio y medicado para que el problema se sopese de algún modo.
Es imprescindible, en primera instancia, realizar una limpieza delicada pero exhaustiva de la piel, eliminando impurezas que puedan surgir del cúmulo de actividades diarias a las cuales debemos enfrentarnos. Además de esto, es necesario eliminar todo exceso de maquillaje que nos quede del día, optando también por hacer uso de uno medicado para que no afecte sobremanera las pieles delicadas.
La hidratación es otro de los aspectos fundamentales para el cuidado de las pieles delicadas, la cual debe propender por ser líquida. Con esto, deberás optar por cremas hidratantes (también importante que sean con receta médica), con las cuales aportes el toque de frescura que tu piel merece, propendiendo por su cuidado, salud y belleza.
¿Qué recomendaciones seguir en cuanto a la ingesta de alimentos o el uso de plantas para el cuidado de las pieles delicadas?
Para tratar aquellas pieles más delicadas, es muy útil tomar infusiones de cola de caballo o bien aplicarlas directamente sobre la piel. La cola de caballo es una planta que contiene silicio el cual es un mineral que ayuda a regenerar las células de las pieles más delicadas aportándoles gran cantidad de propiedades.
Esto, además de ser uno de los trucos más saludables que existen para el cuidado de pieles delicadas, debe acompañarse de una ingesta de alimentos ricos en nutrientes, agua y minerales, fuentes primordiales que contribuyen de una manera significativa, al cuidado y protección de la piel otorgando conjuntamente, muchas propiedades saludables para el funcionamiento general de tu organismo.
No olvides que es indispensable la hidratación general de la piel, ya sea con agua o con líquidos que aportan a su vez, sales vitales para mantener la humectación de tu piel.