Seguramente tu cuerpo te pida algo de movimiento, y que tú desees alcanzar un buen tono físico. Hay multitud de actividades deportivas en el mercado, aunque si ninguna te convence lo suficiente, si tampoco te agrada visitar un gimnasio de forma regular y mucho menos ejercitarte sobre una máquina, hay una actividad muy primaria que te ayudará a mantenerse en forma: caminar. Es básico y está en desuso, pero nos dará unos cuantos beneficios saludables, siendo un plan especialmente destinado a personas mayores.
Los jóvenes también pueden practicar esta actividad que ejercita las piernas y otras partes del cuerpo, pero éstos necesitan a su edad moverse de forma más activa que una persona “entrada en años”, más o menos a partir de los cincuenta, donde si no se desea hacer deporte como antes (o ya no se puede), caminar es una excelente actividad deportiva para mantenerse en forma, para no engordar y hasta para relajarse.
Caminar, aunque suene algo extraño, es uno de los ejercicios más completos, y baratos, que existen. Un paseo diario de unos 30 minutos, incluyendo algún tramo en subida, son suficientes para activar la circulación sanguínea, evitando así que el corazón se vaya oxidando progresivamente, y para mejorar nuestra capacidad pulmonar. Estos beneficios también se verán en el peso de esa persona, aunque no sea a corto plazo, salvo que caminemos algo más de tiempo, ya que el cuerpo suele empezar a quemar calorías hacia la media hora, aunque esto depende de cada persona.
Por consiguiente, aparquemos el coche o dejemos el autobús en la parada y hagamos ese trayecto andando, pues encontraremos una recompensa muy saludable, y si pasadas unas cuantas semanas nos vemos con fuerza, avancemos al segundo escalón: trotar.