Es difícil perderse por Barcelona y no toparse con alguno de los 400 edificios diseñados por Enric Sagnier. Fachadas, templos y palacios salpican con rigor arquitectónico las calles de la Ciudad Condal. Prolífico, ecléctico y riguroso, Sagnier fue uno de los arquitectos modernistas con más éxito profesional de finales de siglo XIX y principios del XX. Sin embargo tras su muerte, su obra cayó en el olvido y figuras como Gaudí, Domènech i Montaner y Puig i Cadafalch se convirtieron en referentes del modernismo catalán.
A su nieto, el financiero Antonio Sagnier Bassas, se le metió entre ceja y ceja recuperar la figura de su abuelo. Era una asignatura pendiente desde hacía años. Así que buscó la manera de potenciar su obra y dar a conocer al gran público maravillas arquitectónicas como el Templo del Sagrado Corazón del Tibidabo, la sede central de la Caixa de Pensions de Barcelona, en Via Laietana, o la Casa Arnús. La edición de libros ha sido el modo de divulgar la trayectoria de Enric Sagnier.
Sagnier Arquitecto, Ruta Sagnier.Arquitecto y Sagnier Architect by Candida Höfer son hasta el momento las tres publicaciones con las que Antonio Sagnier ha comenzado a sacar del olvido la figura de su abuelo. Y no ceja en su empeño de divulgar el legado de Enric Sagnier. Por eso, ya ha empezado a cocerse un cuarto libro en el que las fachadas serán las protagonistas.
De momento toca disfrutar de este libro que ya ha recibido sus primeras críticas en periódicos como El País y La Vanguardia que os dejamos aquí para les deis un vistazo.