Tarta de Limón

La tarta de limón es un postre típicamente francés que combina a la perfección los sabores y las texturas de la pasta brisa, la crema de limón y el merengue. Se trata de un postre ligero y suave que no es muy difícil de elaborar y que en pocos minutos esta listo. En muy buena elección para las ocasiones más especiales.

Tiempo Total: 25 Minutos

Ingredientes para 6 personas

• Pasta brisa: 1 lámina
• Harina: 50 gramos
• Azúcar: 300 gramos
• Fécula de maíz: 3 cucharadas soperas
• Agua hirviendo: 3/4 de litro
• Sal: 2 pellizcos
• Huevos: 3 unidades
• Limón: 1 grande
• Mantequilla: 1 cucharada sopera

Preparación

• Se extiende la pasta brisa en un molde y se pone a hornear a 180 grados hasta que esté doradita.
• Cuando está ligeramente dorada se saca del horno y se deja enfriar.
• A parte se ponen 200 gramos de azúcar, la harina y la fécula de maíz en una cacerola y se lleva al fuego. Inmediatamente se va agregando, poco a poco y sin dejar de remover, el medio litro de agua hirviendo y se deja cocer durante 10 minutos.
• Por otro lado, se separan las yemas de las claras de los huevos. Las claras se reservan para el merengue y las yemas se ponen en un bol junto a una cucharada sopera de la mezcla del agua hirviendo.
• Se baten bien las tres yemas con el líquido y se agregan nuevamente a la cacerola. Sin dejar de remover se cuece toda la mezcla hasta que espese y quede una textura cremosa.
• Cuando la mezcla ha adquirido la textura de crema se retira del fuego y se le agrega el jugo y la ralladura del limón previamente rallado y exprimido, un pellizco de sal y la mantequilla. Se remueve todo nuevamente hasta que quede una crema homogénea y se vierte en el interior del molde.
• Mientras se va enfriando la crema se prepara el merengue batiendo las claras a punto de nieve con un pellizco de sal. Cuando las claras han obtenido el punto de nieve característico se le agrega, poco a poco y sin dejar de remover, el azúcar.
• Se extiende cuidadosamente el merengue por encima de la crema y se introduce en el horno previamente calentado a 160 grados durante unos pocos minutos hasta que el merengue quede dorado.
• Se deja enfriar a temperatura ambiente y posteriormente se introduce en el frigorífico para poderlo servir bien frío.