Algunas personas presentan una obsesión bastante particular, el hecho de beber agua sin parar y sin control, este trastorno se denomina potomanía. Exactamente, me estoy refiriendo a la aparición de un deseo de tipo compulsivo para beber agua sin tener sed y por alguna causa mental.
Tengamos en cuenta que el exceso de agua en el organismo causa una disolución del sodio, del potasio y del magnesio que se encuentran presente dentro de la sangre. Esto genera la aparición de agotamiento, calambres y pérdida de agilidad mental. Aunque suene extraño existen personas que sin un motivo aparente llegan a beber más de 15 litros de agua por día.
El deseo compulsivo de beber grandes cantidades de agua es causado por alguna enfermedad mental. Si bien el hecho de beber agua se encuentra vinculado con la salud, como siempre ocurre los extremos son malos. Si nosotras no bebemos la cantidad de agua necesaria por día estamos causando que nuestro organismo pueda deshidratarse, ya que el agua es muy necesaria para el correcto funcionamiento del organismo, pero como siempre sucede en la vida, todo tiene un límite.
Los pacientes que sufren este tipo de adicción u obsesión pueden beber cantidades que parecen imposibles de agua, superando ampliamente los 8 litros diarios y en casos extremos llegando a consumir 15 litros.
Normalmente estas personas beben y beben todo el día, solo porque en algún sitio escucharon que el agua rejuvenece y adelgaza, uno de los tantos mitos urbanos que deben ser desplazados.
El exceso de agua trae diferentes problemas, entre ellos la aparición de la diabetes o los trastornos hipotalamitos.