Seguiremos hablándote acerca de la necesidad de cambiar nuestros hábitos alimentarios para cuidar nuestra salud.

En los casos en que sientas que estás reteniendo líquidos podrás optar por consumir mezclas de hierbas destinadas a su eliminación natural, pero antes de tomar nada lo aconsejable es que consultes con tu médico para descartar cualquier tipo de efecto secundario.

Una forma simple de tomar conciencia de lo que comemos es anotarlo, así será más fácil planificar las comidas en base a la cantidad de calorías y te darás cuenta de las cosas que comes, innecesariamente, entre comidas. Cada 15 días podrás pesar lo que comes, así entenderás si las medidas son o no adecuadas y evitarás que con el paso de los días una porción se convierta en media.

Es necesario que respetes la cantidad de comidas por día, nunca te saltes el desayuno. Gracias a él podrás empezar a quemar calorías desde las primeras horas del día.

Para lograr un descenso de peso más rápido y para mantener el correcto funcionamiento de tu organismo de forma integral deberás comenzar a moverte más. Una de las medidas que puedes tomar es salir a caminar todos los días, subir y bajar escaleras y hacer las tareas de tu hogar con más movimiento. Si tienes un perro, una excelente idea es sacarlo a pasear varias veces por día, esta tarea será muy buena para los dos, además cuando finalice la jornada habrás caminado muchísimo sin haberte dado cuenta, ya que estabas lo más entretenido.

Si bien algunos hábitos pueden ser cambiados por todos los miembros de la familia no es necesario que todos se pongan a dieta. Quizás si sería bueno para todos optar por alimentos más saludables, evitando las grasas y los fritos, pero no puedes obligarlos a disminuir las calorías.